MARINA TESTINO, ACTIVISTA 'COOL' POR EL CAMBIO EN LA MODA

Su apellido es prácticamente un sinónimo de moda. Marina Testino (Nueva York, 1994), sobrina del célebre fotógrafo Mario Testino e hija de Giovanni Testino, fundador de la reconocida agencia de fotografía y representación de artistas Art Partner, ha crecido rodeada del bling bling del universo fashion, pero no se ha dejado cegar por él. Al contrario. La joven, galardonada con el premio ELLE Eco al ARTivismo en 2022, ha volcado toda su experiencia y conocimiento del sector, uniéndolos a su vena creativa, para convertirse en una activista por el cambio tanto en la producción como en los hábitos de consumo de ropa en el mundo. «Casi todos sabemos que la industria de la moda es una de las más contaminantes del planeta, pero, hasta que las consecuencias no nos afectan directamente y las sentimos en primera persona, no hacemos nada para virar», asegura.

Por eso, ha creado un nuevo proyecto, Timeless Threads, con el que pretende reabrir la conversación urgente sobre la importancia de poner el foco en los materiales de producción de las prendas, tanto para evitar más daños en la salud de los seres humanos como en la del planeta. «Más del 60% de los tejidos que se usan son sintéticos, es decir, plástico, pero la mayoría no sabe diferenciarlos de los naturales. Y, mucho menos, conoce las consecuencias negativas que implica su uso para la piel, el cabello o los órganos. Estás respirando y llevando encima petróleo 24 horas. No podemos mirar para otro lado», explica.

Por eso, ella ha buscado una forma original, dirigiendo y protagonizando este editorial en el que solamente aparecen prendas de segunda mano en los looks, para concienciar a la población de la necesidad de un consumo responsable y de la importancia de leer las etiquetas de confección de la ropa, al igual que se hace cada vez más con los alimentos. «En todos mis proyectos, intento mostrar cosas fáciles que la gente puede hacer para ser parte de la solución. Hablar del cambio climático, de contaminación o incluso de fast fashion, en general, ya hemos visto que no llega al consumidor. Pero, si muestras ideas de estilismos que son cool, coloridos y de tendencia con prendas upcycling o de segunda mano, que son las que menos contaminan porque ya existen, vas a abrir la posibilidad de que las vean con otros ojos y olviden el estigma que tienen hacia ellas, sobre todo en España», añade.

Aunque su camino en este mundo empezó como modelo, pronto se dio cuenta de que su cometido era renovar las reglas del juego de la industria. «Era 2017, durante la NY Fashion Week, y me vi yendo a tres eventos diferentes en un día y cambiándome de estilismo para cada uno de ellos. Me di cuenta de que no quería ser la misma voz, deseaba transformar las cosas y eso había que hacerlo desde dentro», recuerda. Así que tomó la decisión de asistir a todos los eventos, durante dos meses, con el mismo traje rojo. «En el segundo al que fui, se me acercaron varias personas a decirme: “Ya te pusiste eso hace dos semanas”. Tenía 22 o 23 años, y pensaba: “¿He hecho algo malo? ¿Qué significa repetir outfit para los demás?”. Me pareció gravísimo. Así que me propuse demostrar que se puede estar en la moda, ser estilosa y acudir a reuniones y a fiestas siendo más consciente y sostenible», cuenta.

Desde ese momento (aunque hasta su agencia de representación dejó de trabajar con ella), sólo colabora con marcas eco, como modelo y/o como directora creativa, y se ha convertido en un icono de estilo con la etiqueta vintage siempre por bandera. «Es algo que siento que tengo que hacer, me sale de dentro. Y la única forma de cambiar las cosas de verdad pasa por la creatividad», afirma.

*Peluquería y maquillaje: Regina Khanipova. Localización: Bcn Estudio Fotográfico.

2024-05-19T05:11:32Z dg43tfdfdgfd